martes, 22 de marzo de 2011

Mi visita a Faunia

¡Buenos días a todos!

Antes de nada quería disculparme, porque llevo ya más de un mes sin actualizar el blog, y es que he estado ocupada.

Os voy a contar lo que he hecho este último fin de semana. Para celebrar mi cumpleaños (que fue el 18 de marzo), y el de una amiga fui con mis amigos, mi novio y mi hermana a Faunia.

Aunque el pabellón de evolución estaba cerrado vimos un montón de cosas más:

En el “Manglar de los cocodrilos” que fue la primera área en el que estuvimos, vimos, básicamente y como su nombre indica, cocodrilos. Estaban bastante inactivos: tirados en el suelo sobre su enorme panza, sin moverse para nada, pero, ¡respiraban!

(cocodrilo)

En el llamado “Jardín del Edén” pudimos ver diferentes especies de mariposas, además de tarántulas e insectos palo. No tenía mucho mérito buscar a los bichos palo, teniendo en cuenta que en el terrario en el que estaban, lo difícil era buscar un palo de verdad. Pero era divertido que las mariposas pasaran por encima de ti y por entre las piernas.

(mariposa, no sé qué especie)

En la zona de “El lago” se supone que había perritos de la pradera, pero yo no los vi, estaban todos bajo tierra. Lo que sí que vimos fueron monos capuchinos, flamencos, cisnes, y demás aves acuáticas. Y en “El lago de los pelícanos” había, efectivamente, pelícanos. A la otra cumpleañera le regalamos una interacción con pelícanos que consistía en entrar en la jaula con ellos para servirles de comida para darles de comer.

(pelícanos)

En la “Isla mazama” no vimos mazamas (los vimos en otro sitio), pero había capibaras y unos animales llamados mara a los que rebautizamos como cabranejo, por razones evidentes.

(maras, fotografía de la web de Faunia)

“Sombras silenciosas” era una zona bastante grande en casi total oscuridad en la que te mostraban los animales nocturnos. Pudimos ver pitones, lémures, mapaches, ocelotes, chinchillas, caballitos de mar, murciélagos, mofetas, cerdos hormigueros, “monos de noche” entre otros muchos animales.

(cerdo hormiguero, fotografía de la web de Faunia)

Luego fuimos a ver la exhibición de osos marinos, que, a mí personalmente, no me pareció muy espectacular, sobre todo si la comparamos con exhibiciones de otros parques zoológicos. Fue más larga la espera que la exhibición.

Después de comer fuimos a ver otra exhibición en el “Foro mágico”, esta otra mucho más espectacular que la anterior. Tener aves rapaces volando sobre tu cabeza, ver cómo pasa un ocelote corriendo por tu lado, y observar como un kinkajou consigue su comida. Por cierto… ¡quiero un kinkajou! Qué cosa más rica, por favor. Tuve la oportunidad de cogerlo y es tan mono… ^^

(kinkajou, imagen de google)

Luego fuimos a los ecosistemas, empezando por el bosque africano, donde vimos a mis queridos lémures, una de los cuales llevaba a sus dos hijitos a cuestas, tan pequeñitos… Otro de los lémures se me acerco a olisquearme, pero sin dejarse tocar. También había varias especies de aves, yo es que no soy mucho de pájaros…

(mamá lemur e hijo)

En el ecosistema de la jungla también había un montón de aves (guacamayos, ibis escarlata, tucanes, además de monos varios, manatíes, serpientes, agutíes, jutias, y muchos otros animales). Cada media hora llueve en el ecosistema de la jungla, así que tuvimos la oportunidad de verlo, y de oír a todas las aves cantando a la vez (¡y de ver a monos mojados!). Pasamos también por el “territorio saimiri” donde estuvimos junto a los monos saimiri, muy simpáticos.

(guacamayos)

En el “bosque templado” pudimos tocar a muntjacks y mazamas (parecen cervatillos) y ver ñandús y faisanes, entre otros.

(mazamas, fotografía de la web de Faunia)

Más tarde fuimos a ver a los famosos pingüinos de Faunia en el “Ecosistema de los polos”, donde hay varias especies de pingüinos.
Después fuimos al territorio “suricata” y al “territorio wallaby”. En el primero pudimos ver a los suricatos (más conocidos como Timón de El rey León), dos de ellos mantenían el acto amatorio. Los wallabies eran bastante sosos, estaban sentados al sol, y no se movían.

(suricato, fotografía de la web de Faunia)

En “El nido” vimos como nacían pollitos. En la zona de “Misterios bajo tierra pudimos comprobar que hacían con los pollitos. Allí vimos sobre todo reptiles, y ya casi a la salida había una mangosta disfrutando de un suculento manjar en forma de pollito.

Terminamos pasando por “La granja” que está destinado sobre todo a los niños, y tocamos burritos, cabras, ponys…

¡Y eso es todo! Intenté llevarme al kinkajou a casa, metiéndolo en la mochila, y lo mismo lo intenté con el lémur, pero nada, no hubo manera. Voy a ver si los consigo en el mercado negro…

¡Sed felices!

PD1.: No os desesperéis si no hago entradas muy a menudo, pero es que estoy ocupadísima con la universidad
PD2.: Espero que comprendáis que el último párrafo era broma.
PD3.: Me quedé con una frase que dijo un niño: "Mamá, ¿las lechugas nadan?". Meditadlo.

9 comentarios:

URL dijo...

Tus aportaciones docentes son muy instructivas y se ve que sabes mucho siendo bióloga: Efectivamente, la foto del cocodrilo es una foto de un "cocodrilo" como bien indicas. Estoy seguro de que ahora tus lectores saben exactamente a cual de las 23 especies de cocodrilos pertenece el de la foto! jajaja

URL dixit

Atonau dijo...

Que bueno tenerte de vuelta... las visitas a los zoos suelen ser... decepcionantes, pero esta tiene cara de haber sido interesante...
Por otro lado no me imagino como podrías conseguir un kinkajou y menos aún como podrías mantenerlo... cierto es que le darías mucho amor... pero, de algo más que de amor ha de vivir el monito aquel, ¿o no?
...
Espero que nos cuentes que etudias y como vá eso... que yo en la U la pase muy bien y viví anectodas... buenas, malas, entretenidas y unas cuantas graciocisimas...

Teté dijo...

URL: Ya he sido lo suficiente especifica diciendo que es un cocodrilo, podria haber dicho que era un lagarto cualquiera. Y no quiero aburrir a mis lectores con nombres de especies y tal.

Atonau: bueno, todo es cuestión de aprender a cuidarlo, como hice con mis jerbos.
Por otra parte, no creas que la uni es muy interesante, teniendo en cuenta que paso allí el tiempo justo y que por las tardes estoy trabajando. Sin embargo intentare hacer mas entradas sobre la universidad y la gente que hay ahí.

Gabriel Cruz dijo...

Qué paseo tan rico, se me ha antojado, los animalitos se ven relajados y eso es bastante bueno, así con ganas va uno al zooo, jejejejeje...
Me habías relajado con lo del último párrafo, porque en más de una ocasión he intentado lo mismo y respiré tranquilo al ver que no era el único, pero con la aclaración regreso a mi angustia, jejejejejeje
Van apapachos Teté ;)

Teté dijo...

Gabriel: bueno, el lemur es mas dificil porque es una especie super protegida. Pero he estado mirando y el kinkajou si que se puede conseguir. El problema: que es muy caro (¡¡¡1.500€!!!)

Obdulio de Oklahoma dijo...

Binito documental sobre los habitantes de esta naturaleza nuestra tan amada y en muchos casos tan despreciada. En el Amazonas y otros lugares del planeta seguimos arrasando con todo tipo de vida vegetal y animal, y en ella hay animales tan preciosos como estos que usted nos muestra y seres humanos que llevan viviendo allí toda la vida, pero claro, no llevan traje y corbata, es gente de taparrabos y no gustan a los "civilizados" y emprendedores hombres de negocios sucios. Estoy empezando a pensar que ya casi todos los negocios son sucios.
¡Ojo con los cocodrilos!, se mueven poco pero cuando les da por moverse... ¡ñam, ñam!, comen lo que pillan, tienen muy buen apetito.
Sí, las mariposas se mueven más. Desde nuestra visión humana son bichillos muy inquietos, del mismo modo que el caracol es lentísimo y las hormigas pequeñisímas. Pero ellos son así. Nosotros, los seres humanos somos una insignificancia en comparación con la inmensidad del Universo, y desde este prisma nos podemos comparar muy bien con las hormigas e incluso con los virus.
¡¿Osos marinos?...! Yo sólo había oído hablar de "lobos marinos", esos señores con barba, el rostro rugoso y una pipa en la boca.
El "kinkajou", extraño nombre, es una criatura muy tierna, desde luego, como Justin Bieber, que también se hace querer por las fans.
¡Buen día, amiga!

Vianne dijo...

Oh, me encantan los suricatos, cada vez que veo un documental me quedo pegada a la pantalla.
El kinkajou me inspira mucha ternura.
Teté, pregunta, que lo mismo puedes apadrinar a uno.
Un saludo!

Teté dijo...

¡Pues no creas que es mala idea! Teniendo en cuenta que el kinkajou cuesta 1500€ y comprar un lemur esta prohibido (no se pueden sacar de Madagascar)...
Puedo hacer varias cosas: apadrinarlos (supongo que en el lemur sera mas fácil, porque está en peligro de extinción, y habrá mas programas de apadrinamiento), o irme a Madagascar a capturar un lemur, o a Centroamerica para capturar a un kinkajou... o comprarme una vaca

Vianne dijo...

Definitivamente la vaca... xD